Los atletas de alto rendimiento saben llevar su organismo al máximo. En pruebas exigentes de ciclismo, o en partidos largos de tenis, quien sepa cuidar mejor su fondo físico estará en posición de llevarse un podio, o el partido. La pregunta es: ¿cómo promover esta resistencia?

Bien, una imagen recurrente en el deporte puede ayudarnos: las proyecciones de Rafael Nadal comiendo un plátano en mitad de un partido, o la de los maratonistas recuperándose con algunos bocados después de varios kilómetros recorridos.

Es que el plátano es un alimento que se alinea a la perfección con las exigencias del deporte. Para empezar, es una buena fuente de carbohidratos. Ello quiere decir que dota al cuerpo con una buena dosis de energía, y más que otros frutos.

El potasio que contiene previene los calambres —sólo hay que ver los partidos de fútbol cuando llegan los tiempos extras— y favorece un buen estado muscular gracias a que mantiene un balance de minerales, y un estado de hidratación ideal en condiciones de desgaste físico.

Según un estudio, una sola pieza contiene cerca del 25% del potasio que el cuerpo requiere durante un día. Además, se ha demostrado que retiene nutrientes como el fósforo, el calcio y el nitrógeno.

Al ser ricas en triptófano, es un fruto que estimula la producción de serotonina, responsable de las sensaciones de bienestar, relajación y satisfacción, además de incidir sobre la capacidad de concentración.

Otros beneficios del plátano los indica indirectamente la OMS: un aumento en los índices de potasio ayuda a reducir la presión arterial y mejora la densidad mineral ósea.

Ahora, ¿cuál es el momento ideal para consumir un plátano al hacer deporte? Esa es otra de sus peculiaridades, puede ingerirse antes, durante o después de practicarlo, con distintos fines.

Previo a la actividad física ayuda a aportar carbohidratos y producir energía suficiente. Mientras se ejercita facilita la recuperación del cuerpo para seguir adelante gracias a su índice glucémico superior. Y, finalmente, después de practicar deporte es una buena fuente de recuperación corporal, desinflamándolo también tras el esfuerzo.

Ahora se entiende por qué las imágenes de nadadores, tenistas, ciclistas y corredores consumiendo plátanos son tan comunes.

Foto de portada: Eiliv Aceron en Unsplash