A menos que una enorme catástrofe azote al planeta, se estima que la expectativa de vida a nivel mundial seguirá aumentando. Tanto es así, que el número de personas de la tercera edad —mayores a 65 años— supera al de los niños menores de cinco años.

Y más allá de las crisis demográficas que esto estará por disparar, queda preguntarnos: ¿de qué depende esta expectativa de vida?, ¿por qué varía entre países? y ¿qué tienen en común los más longevos?

Bien, el país más longevo del mundo tiene una expectativa de vida de 87 años, mientras que el menos, de 53 años. El primero es Mónaco, el último, la República del Chad en África Central. Está claro, más allá de la genética, las condiciones de vida perfilan la longevidad de las naciones.

La lista de los países más longevos tiene en segundo lugar a Hong Kong y le siguen otros como Macao, Japón, Liechtenstein, Suiza, Singapur e Italia, según recupera la BBC del informe de Perspectivas de la Población Mundial de la ONU.

Estos aumentos en la expectativa de vida se relacionan con las mejoras en vacunas, medicamentos, procedimientos médicos, prevención de enfermedades, higiene, normativa sobre los alimentos y otros. Pero también al acceso más general a servicios como agua y salud pública, por ejemplo.

Los países más ricos, evidentemente, están en condiciones de conseguir mejores condiciones de vida vía instituciones públicas, además de crear un entorno de seguridad más generalizado. No es casualidad que los países que lideran la lista sean también considerados regiones con altos ingresos.

Como sea que fuere, las investigaciones han encontrado algunos elementos culturales en común en estos países longevos: destacan puntos como poseer un sentido de vida, reducir el estrés vía actividades extra rutinarias, desarrollar vínculos familiares cercanos, no abusar del alcohol, disfrutar dietas balanceadas, realizar actividad física cotidiana y estar inscritos en comunidades consistentes. El trato cercano con otros ha mostrado ser un factor significativo para vivir más años.

A pesar de que América Latina y el Caribe tienen importantes obstáculos institucionales y altos índices de pobreza, incluso en ellos la expectativa de vida ha crecido. Las mejoras —aunque todavía con muchos problemas— de la salud pública, de los servicio de agua y luz, y de accesibilidad entre regiones ha resultado en una mayor longevidad.

El salto de Colombia es el más importante: de 71 años en el 2000 a 76.8 años en 2021, según datos de la OCDE. Los países que lideran la lista son Chile con 81 años, y después Costa Rica, Barbados y Cuba.

Los números, según todas las proyecciones, seguirán subiendo con el paso de los años siempre que existan condiciones de paz y se eviten epidemias.

Foto de portada: Vlad Sargu en Unsplash